Por Alejandro Valle / Perro Pancho Valle
Es para nosotros un honor poder escribirles sobre la raza Cane Corso, al considerarnos amantes de ella; es una raza de origen italiano, conocida por su tamaño, gran fuerza y un aspecto imponente; un perro equilibrado, cariñoso y muy protector. A continuación, te presentaremos un artículo detallado sobre esta fascinante raza:
Origen e historia
El Cane Corso, también conocido como Mastín Italiano, tiene raíces que se remontan a la antigua Roma. Se cree que desciende de los molosos romanos, perros utilizados en guerras y para cazar animales grandes. A lo largo de los siglos, se adaptó a diversas tareas en la Italia rural, como la guardia de propiedades, el pastoreo y la caza.
Apariencia física
El Cane Corso es un perro grande y musculoso, con un aspecto robusto y atlético. Los machos suelen pesar entre 45 y 50 kilogramos (kg), mientras que las hembras están en el rango de 40 a 45 kg. Su altura a la cruz varía entre 60 y 68 centímetros (cm). Tienen una cabeza ancha y poderosa, orejas y cola que suelen ser recortadas (aunque esta práctica es cada vez menos común) y un pelaje corto y brillante que puede ser de varios colores, negro, atigrado, gris, leonado, formentino y sus variaciones, suele tener pequeñas manchas blancas que se aceptan en patas, pecho y hocico.
Temperamento y comportamiento
El Cane Corso es conocido por ser leal, protector y seguro de sí mismo. Es un excelente perro de guardia, ya que tiende a ser reservado con los extraños, pero muy cariñoso y leal en el ámbito familiar. Con una sociabilización y entrenamiento adecuados, puede ser muy bueno con los niños, adultos mayores y también con animales, incluso de otras especies, aunque su instinto de protección siempre estará presente.
La sociabilización adecuada del Cane Corso durante sus primeros meses de vida es imprescindible para asegurar que este perro grande y poderoso se desarrolle como un compañero equilibrado y bien comportado.
Importancia de la sociabilizacion
Comportamiento equilibrado:
· Un Cane Corso bien sociabilizado es más probable que sea equilibrado y confiable, lo que reduce el riesgo de comportamiento agresivo o temeroso.
Interacción segura:
· Facilita interacciones seguras y positivas con otras personas que no son miembros de la familia y con animales, lo cual es especialmente importante dado su tamaño y fuerza.
Mejor calidad de vida:
· Un perro bien sociabilizado tiende a ser más feliz y menos estresado, lo que contribuye a una mejor calidad de vida tanto para el perro como para sus dueños.
PASOS PARA UNA SOCIABILIZACIÓN EFECTIVA
1. Comienzo temprano:
· La sociabilización debe comenzar tan pronto como el cachorro llegue a casa, idealmente entre las 12 y 14 semanas de edad, cuando son más receptivos a nuevas experiencias.
2. Exposición gradual:
· Introducir al Cane Corso con diferentes personas, incluyendo niños, adultos y ancianos. Esto ayuda al cachorro a aprender a interactuar con diversos tipos de personas.
- Exponerlo a otros perros y animales en un ambiente controlado.
- Las clases de sociabilización para cachorros pueden ser muy beneficiosas.
3. Diversidad de entornos:
· Llevar al perro a diferentes lugares como parques, calles concurridas, tiendas de mascotas, etc. Esto le ayuda a acostumbrarse a diferentes entornos, sonidos y situaciones.
4. Experiencias positivas:
· Asociar nuevas experiencias con cosas positivas como golosinas, juegos y elogios. Esto ayuda al perro a formar asociaciones positivas con las nuevas situaciones y personas que encuentra.
5. Entrenamiento básico:
· Empezar con el entrenamiento básico de obediencia, que incluye comandos como “sentado”, “quieto”, “ven”, etc. Esto no solo ayuda en el control de la mascota, sino que también refuerza el vínculo entre el perro y el dueño.
6. Calma y paciencia:
· Mantener la calma y ser paciente. Es importante no forzar al perro a enfrentar situaciones que lo hagan sentir extremadamente incómodo o temeroso. La sociabilización debe ser gradual y adaptada al ritmo del perro.
7. Manejo de comportamientos negativos:
· Observar y corregir comportamientos indeseados como la agresión o el miedo excesivo. En estos casos, puede ser útil trabajar con un entrenador profesional o un conductista canino.
8. Continuidad:
· La sociabilización no termina con la etapa de cachorro. Se habrá de continuar exponiendo al Cane Corso a nuevas experiencias a lo largo de su vida para mantener su sociabilidad y buen comportamiento.
En conclusión, la sociabilización del Cane Corso es un proceso fundamental que requiere tiempo, paciencia y consistencia. Un Cane Corso bien sociabilizado puede ser un compañero leal y protector, capaz de interactuar adecuadamente con su entorno y las personas que lo rodean. La dedicación a la sociabilización y el entrenamiento temprano aseguran que el perro se desarrolle de manera saludable y se integre bien en la familia y la comunidad.
Cuidados y necesidades
Ejercicio:
Necesita una cantidad considerable de ejercicio diario para mantenerse saludable y equilibrado. Paseos largos, sesiones de juego y actividades que estimulen su mente son esenciales.
Entrenamiento:
Requiere un dueño experimentado que pueda proporcionarle un entrenamiento firme y consistente. La sociabilización temprana es crucial para prevenir comportamientos agresivos o temerosos.
Salud:
Como muchas razas grandes, el Cane Corso es propenso a problemas de salud como displasia de cadera y codo, torsión gástrica y enfermedades cardíacas. Las visitas regulares al veterinario y una dieta equilibrada son fundamentales para su bienestar.
Consideraciones finales
El Cane Corso no es un perro adecuado para todos. Necesita un hogar donde se le pueda proporcionar el tiempo, la atención y el entrenamiento que requiere. Es ideal para personas que tienen experiencia con perros grandes y un entorno donde el Cane Corso pueda ejercer su función natural de protector.
El Cane Corso sin duda es un perro impresionante y fascinador, tanto en apariencia como en personalidad, ideal para aquellos que buscan un compañero leal y protector.